top of page

Mineralogía

Minerales de Río Tinto[5][6]

Análisis recientes de la mineralogía en Río Tinto, utilizando las mismas técnicas de espectroscopia Mössbauer y difracción de rayos X que se han usado en Marte, identificaron gran diversidad de minerales del azufre, entre ellos, la jarosita. Este mineral se deposita en el lecho del río debido a la evaporación estacional de las aguas, junto con otros minerales como la schwertmannita, también sulfurado. Conocemos varios posibles procesos para la formación de la jarosita en la Tierra pero todos implican la presencia de un ambiente ácido. Algunas de esas formas, en concreto, necesitan agua. La jarosita hallada en Marte presenta propiedades similares a las de la jarosita terrestre. Sin embargo, para poder determinar con seguridad si esta jarosita marciana se creó bajo condiciones acuáticas es necesario un análisis más exhaustivo del que puede llevar a cabo alguno de los robots en Marte. Tareas como datar la formación del mineral, conocer la temperatura a la que se generó o las condiciones en las que se depositaron los componentes que lo forman son aspectos clave. Por tanto, es inminente que se necesitan recoger muestras de suelo marciano y traerlo a la Tierra, una tarea muy complicada por el momento. Mientras, los científicos trabajan en la búsqueda de meteoritos marcianos caídos en la Tierra para poder examinarlos en busca de jarosita.

Créditos de imagen: Christian Rewitzer.

 

Cristal de jarosita.

Mediante espectroscopia y difracción también se detectó hematita y goethita en los sedimentos. Otros minerales descritos en diferentes estudios en la cuenca incluyen la copiapita, la coquimbita y el yeso, todos minerales del azufre. Los minerales de hierro más abundantes son la pirita y la calcopirita pero también se detectó magnesita, un derivado del primero. Gracias a los estudios realizados en el proyecto IPBSL se demostró que las condiciones extremas de Río Tinto son consecuencia de la existencia de minerales de azufre en la Faja Pirítica Ibérica sobre la que yace la cuenca.

Créditos de imagen: Tania MT.

Diagrama con la clasificación de los minerales mencionados en este apartado. 

Por otro lado, la composición de minerales encontrados en las diferentes terrazas que conforman la cuenca de Río Tinto sugiere que la presencia de algunos microorganismos como la bacteria Acidiphilium sp. o el hongo filamentoso Purpureocillium lilacinum pueden modificar el tipo de mineral que precipita al cambiar las condiciones fisicoquímicas del ambiente en el que se encuentran, pudiendo servir como posible marcador de metabolismo microbiano. Además, en las terrazas más antiguas de la cuenca se detectaron moléculas orgánicas complejas que demuestran que es posible hallar evidencias de actividad biológica de  hace miles de años en estos ambientes extremos gracias a que las condiciones ácidas promueven su preservación.

1. Jarosita depositada en los sedimentos donde nace el río.

2. Microfósil preservado en goethita en una terraza antigua.

3. Precipitado de goethita de otra terraza más moderna. 

Créditos de imagen: David Fernández-Remolar et al, extraído de “The Río Tinto Basin, Spain: Mineralogy, sedimentary geobiology, and implications for interpretation of outcrop rocks at Meridiani Planum, Mars”.

© 2015 por Tania MT. Creado con Wix.com

bottom of page